martes, 20 de noviembre de 2012

La despedida...

Te digo adiós, y acaso te quiero todavía.
Quizá no he de olvidarte, pero te digo adiós.

Este cariño triste, apasionado y loco, 

me lo sembré en el alma para quererte a ti.
No sé si te amé mucho... No sé si te amé poco;
pero sí sé que nunca volveré a amar así.

Me queda tu sonrisa dormida en mi recuerdo, 

y el corazón me dice que no te olvidaré;
pero, al quedarme sola, sabiendo que te pierdo,
tal vez empiezo a amarte como jamás te amé.

Te digo adiós, y acaso, con ésta despedida, 

mi más hermoso sueño muere dentro de mí...
Pero te digo adiós, para toda la vida,
aunque toda la vida siga pensando en ti. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario