miércoles, 27 de julio de 2011

Lágrimas del Corazón - Prólogo

Hacía ya 2 semanas que él se había marchado y mañana sería su cumpleaños. ¡Vaya forma de festejarle! Por unos instantes me odié por no poder estar con James en su día especial. Pero bueno, sólo sería en ésta ocasión y en unos días más podría verlo, abrazarlo y todo sería como antes.

James… Parecía que fue ayer cuando nos conocimos, pareciera que fue hace unos momentos cuando nos dimos nuestro primer beso o cuando nos tomamos de la mano y caminamos juntos por el parque… Él era todo lo que yo podría pedir. Y no es que sea yo una experta en el amor, sólo tengo 17 años, pero estaba total y completamente enamorada de James.

Ese mismo día por la noche mi celular sonó y, como lo había sospechado, era él. Su voz tenía un tono serio y al instante lo noté.

Tenemos que hablar – Dijo, después de un silencio monótono.

Enseguida supe que mis sospechas eran ciertas; sí se trataba de algo serio.
-      
            He estado pensando mucho las cosas, y… - Comenzó – No creo que esto nos esté llevando a ningún lado. Creo que lo mejor es dejar así las cosas y probablemente nunca volvamos a vernos…

Y fue justamente en el preciso momento que sentí que mi corazón se partía, no en dos ni tres, sino en mil y un partes. Fue entonces que sentí que mi mundo se derrumbaba, que mi corazón dejaba de latir, por un minuto sentí que no valía nada. Que todo lo que tenía se había ido por aquel auricular. No tenía palabras, me faltaba el aire, no sabía qué vendría después ni qué haría.

No contesté. Mi única reacción fue dejar caer el teléfono y seguir caminando por la acera en la que iba.

No sé si fueron horas, días, semanas o meses los que transcurrieron. No sé si fueron una o dos veces las que salí de mi habitación después del incidente, lo único de lo que pude percatarme es que mañana sería Año Nuevo y todos parecían muy felices y entusiasmados, excepto yo.

Miré el reloj; justo medio día. Tenía que hacer algo, no podía seguir muerta en vida. Tenía que ser capaz de dejar todo ese posible rencor a un lado, debía liberarme de todo el dolor y seguir adelante. Tenía que hacerlo si no quería hundirme en un abismo sin salida. 

sábado, 23 de julio de 2011

(589*).

Estoy en el hoyo.


Así es. De verdad, mierda. Todo me recuerda a ti. Todo me hace pensarte, todo lo que me rodea me obliga a pensarte.. Y no sé si lo sabes, pero que no hablemos (o no nos  veamos) no significa que lo que siento haya cambiado. Sino lo contrario.. A veces me siento estúpida porque siento que, dentro de mí, todo esto va creciendo a pesar de todo.


Demonios. Odio levantarme y sentir ese dolor tan pendejo aplastándome el pecho, que la mayoría de las veces ni respirar me deja. Lo odio terriblemente, probablemente sea la única cosa que odie completamente en éste mundo. Y no se lo deseo absolutamente a nadie. 


Sólo quiero que me mires a los ojos, que me digas que también extrañas todo y que todo estará bien.. ¿Es mucho pedir?..

viernes, 22 de julio de 2011

(588*). Emlékek..

*Sighs* Hace unas horas no tenía nada que hacer y me puse a limpiar mi bandeja de entrada de Hotmail (de atrás hacia adelante, como es mi costumbre). Tenía exactamente 536 mensajes guardados. Comencé a borrar los que creía que no me servirían más y... Vaya sorpresa. Apareció un remitente: Twitter, y un sólo nombre: El tuyo.. Así es. Nuestros DM's.


No sé si fue casualidad o mi subconsciente, pero sonaba "So Contagious" (versión acústica, que se escucha más emo, btw). En fin.. Comencé a leer, y así, con el primer mensaje salió una lágrima. La limpié de inmediato ya que mi madre estaba en la pieza de alado. 


Así, fui leyendo uno en uno más de 400 mensajes vía Twitter. Cada uno de ellos con toda una historia que contar, con un sentimiento sutilmente oculto y... Bueno. Sobra decir que mis ojos se tornaron rojos y a punto de desbordar mil lágrimas que repetían tu nombre una y otra vez.


¡Mierda! No se supone que debía estar leyendo eso, mucho menos con ésta música corta-venas. No se suponía que debía sentirme de este modo en específico. No se suponía que fuese así de doloroso. Jamás lo creí. 


Lo único que puedo decir es que lo extraño, te extraño, y no sabes cuánto desearía que todo fuese igual, de nuevo. (Bueno, probablemente no igual, sino mucho mejor..)
Extraño todos esos momentos <3; cuando no dejábamos de hablar entre clases, cuando nos reíamos de Idalia (muahaha), nuestras salidas, cuando te picaba *o*, cuando te cohibías de una forma tan.. No sé, única, y todo mi mundo se venía abajo justo por ese momento.. O simplemente cuando te veía sonreír, era ahí cuando mi día comenzaba realmente, cuando podía decir que había valido la pena levantarme de la cama ese día. 


Pero hoy.. ¿Hoy qué me queda? 
Todos son putos recuerdos. Todo es tan irreal, excepto este sentimiento tan... Asdf que no se va (y no piensa irse) de aquí, y la verdad es que todo esto me está matando.
Dammit. Te quiero. Eso lo sabes.. Te quiero como probablemente no haya querido a nadie jamás.. Y no sé, tampoco quiero condicionar nada pero.. Me gustaría que me dieses la oportunidad de que todo vuelva a ser, no igual, sino mucho mejor :D. Aún tengo esa esperanza. 
Y probablemente pienses que no hay tiempo, pero sé que no es así :), tiempo es lo que sobra.. Tal ves me iré, pero eso no significa que deje de verte a ti o a los demás hueónes del colegio. 

jueves, 21 de julio de 2011

(587*).


No puedo darte soluciones para todos los problemas de la vida, ni tengo respuestas para tus dudas o temores, pero puedo escucharte y buscarlas junto contigo.
No puedo cambiar tu pasado ni tu futuro. Pero cuando me necesites estaré junto a ti.No puedo evitar que tropieces. Solamente puedo ofrecerte mi mano para que te sujetes y no caigas.Tus alegrías, tus triunfos y tus éxitos no son míos. Pero disfruto sinceramente cuando te veo feliz. No juzgo las decisiones que tomas en la vida. Me limito a apoyarte y a ayudarte si es que me lo pides.No puedo evitar tus sufrimientos cuando alguna pena te parta el corazón, pero puedo llorar contigo y recoger los pedazos para armarlo de nuevo.

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Uno de los más grandes regalos que nos da la vida misma, probablemente sea la amistad. Y en lo personal, no es un tema del cual yo sea experta, pero en fin..
He encontrado a esa personita especial <3, con quien puedo hablar de lo que sea, con la cual puedo pasar horas y horas hablando, esa persona con quien me siento segura, me apoya, me escucha y que ha sabido darme sabios consejos..
Lo he encontrado. Ese granito de arena que, para mí, significa toda la playa. Ese pequeño ser que alegra mis días y, que de verdad, me ha enseñado a querer.
Y no, no hablo de una pareja.. Hablo de algo que creo que vale mucho más. Hablo de mi "nuevo" (desde la declaración en Twitter xd) mejor amigo.
Sí, terroncito. Hablo de ti.

¿Sabes? Hace unos meses probablemente hubiese considerado sólo a 1 persona mi verdadera amiga, hace unos meses sólo tenía un hombro para apoyarme, una mano que me levantara, alguien que me escuchara. Pero hoy.. Hoy puedo decir que son 2.
De verdad agradezco que te hayas cruzado en mi TL xD.
Te quiero mucho, Terroncito (L). Sé que esto va para mucho más adelante y, pinky promise, que cuando vuelva al DF, serás la primera persona que visite y correré a abrazarte :D.


PD: Lo prometido es deuda :D, aunque ya sé que aún te debo una carta en griego :c.

sábado, 16 de julio de 2011

(582*).

Si el amor fuera número, sería infinito, sin principio ni final.
Si el amor fuera comida, sería un enorme pastel, que puede ser dulce pero también puedes empalagarte.
Si el amor tuviera forma, sería un círculo.
Si el amor fuera animal, sería un águila, libre y feroz a la vez.
Si el amor fuera persona, sería Dios.
Si el amor fuera tela, sería seda, suave y muy delicada.
Si el amor hablara, sería muy incoherente.
Si el amor fuera un objeto, sería una puerta, con la opción de estar abierta o cerrada.
Si el amor caminara, estaría todo el tiempo dando vueltas en círculos.
Si el amor fuera ropa, sería una manta, que te cubre en los momentos más fríos.
Si el amor fuera un desastre natural, sería una tormenta, donde todo parece malo al principio, pero finalmente se encuentra un arco iris.
Si el amor fuera flor, sería un girasol, siempre radiante.
Si el amor fuera color, no sería rojo.
Si el amor fuera risa, sería una carcajada.
Si el amor fuera lágrima, sería la más grande y pesada.
Si el amor fuera un paquete, no tendría la etiqueta de "Frágil".
Si el amor fuera médico, no sería cardiólogo, sino psicólogo.
Si el amor fuera una carrera, sería arquitectura.
Si el amor fuera canción, tendría la mejor armonía.
Si el amor fuera letra, sería la "M", en medio de todo.
Si el amor fuera pintura, sería abstracta, donde sólo unos cuantos son capaces de entenderla.
Si el amor fuera poema, no rimaría.
Si el amor fuera refrán, sería "Más vale tarde que nunca".
Si el amor fuera calle, sería un callejón sin salida.
Si el amor fuera visita, no sería puntual.
Si el amor fuera despedida, diría "Hasta pronto", nunca -Adiós-.
Si el amor fuera petición, sería "Quédate".
Si el amor estuviera personificado, serías tú.

domingo, 10 de julio de 2011

(576*)

Ayer, recostadas en un mueble, en la terraza de mi casa, mirando al cielo, mi madre y yo charlábamos. 
- ¿Crees en la reencarnación? - Le pregunté.
Y de ahí, un sin fin de respuestas surgieron, ninguna concreta. Comenzó a hablarme de libros, revistas, supuestos relatos, en fin.. Tiempo atrás que ya tenía curiosidad, pero ella abrió aún más ese interés.

- ¿Qué viene después de la muerte? - 
Me niego a creer que simplemente morimos y listo. Tiene que haber algo después, ¿o no? 
Aunque, también me niego a pensar que nos vamos al "paraíso" (cielo, o como ustedes lo llamen) donde todo es perfecto, donde no hay dolor ni cosas malas, sólo felicidad y eternidad. Qué monótono sería, en ese caso. 

No sé si me doy a entender, pero bueno, ese no es el punto.

El punto es que, hoy, como cada Domingo, salí a comer con mis padres.. Alado de donde fuimos a comer había una librería (siempre pasaba por ahí cuando voy al teatro, pero nunca le había dado tal importancia). Como sea, entré.. Comencé buscando algo de Buda, la reencarnación y esas cosas, y en el segundo estante me llamó la atención un pequeño libro amarillo. Leí el título, vi la imagen de la tapa y lo dejé en su lugar, ya que no era lo que yo realmente buscaba (o eso creía)..
Seguí buscando, pero mi madre, que venía detrás de mí, volvió a mostrarme éste libro: "El cielo es real".. Me dijo que se veía interesante, que leyera la contra-portada. Y así lo hice.
No fue necesario más que leer los dos primeros renglones como para querer hojearlo y abrirlo. Lo hice. Me fui directo al índice y noté que todos los capítulos contenían una cita bíblica. Me desilusioné (y no porque no crea en Dios, sino porque.. Bueno, lo creí diferente).
De cualquier forma, mi madre lo compró (yo elegí otros dos).. Pero aquí me ven, he leído sólo dos hojas y no puedo esperar a dejar de escribir ésto para seguir leyendo.
No sé si fue casualidad, el destino o algo así. Pero ésto me ha caído del cielo.

viernes, 1 de julio de 2011

(568*)

Aprendí que no hay que darle "tiempo al tiempo", simplemente hay que tener paciencia, saber esperar y dejar que las cosas fluyan a su ritmo propio.
Aprendí que los amigos no se pierden o se van, sólo terminamos por darnos cuenta de quienes son esas personas que valen la pena o con quienes podemos contar realmente.
Aprendí que añorar a alguien no le hace tuyo, que querer a alguien no hará que te quieran de vuelta y que se puede querer demasiado a alguien en tan poco tiempo...
Aprendí que el terreno del mañana es demasiado inseguro para hacer planes, y los futuros tienen su forma de caerse por la mitad.
Y así, con el tiempo... Aprendí.